El presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió a resolver las diferencias y la falta de comunicación entre México y Estados Unidos en torno al traslado y captura de los narcotraficantes Ismael «El Mayo» Zambada y Joaquín Guzmán López, antes de que Claudia Sheinbaum asuma la presidencia. Sin embargo, reconoció que el tiempo podría jugar un papel en la resolución de estos conflictos, por lo que esperará más información del gobierno estadounidense.
AMLO descartó buscar una conversación directa con el presidente Joe Biden para tratar el asunto, prefiriendo que las dependencias del gobierno estadounidense involucradas proporcionen la información necesaria. Asimismo, no ha solicitado una reunión con el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar.
El mandatario recordó que en un caso similar, cuando Salvador Cienfuegos fue detenido en Estados Unidos, también se actuó con cautela y tiempo. López Obrador confirmó el asesinato de dos personas vinculadas a Zambada, indicando que la Fiscalía General de la República será la encargada de investigar.
En cuanto a los rumores sobre negociaciones de algunos miembros de los «Chapitos» con el gobierno de Estados Unidos, el presidente mencionó que es una práctica común por parte de las autoridades estadounidenses, y que convertir a estos individuos en testigos protegidos está dentro de sus normas.
Finalmente, López Obrador criticó la supuesta complicidad entre ciertos medios de comunicación y agencias estadounidenses, advirtiendo sobre la manipulación de la información y el riesgo de que gobiernos extranjeros utilicen estas tácticas para presionar o chantajear a otras naciones.