El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció el viernes una operación de ayuda humanitaria sin precedentes para la Franja de Gaza, devastada por la guerra, consistente en lanzamientos aéreos de alimentos y suministros desde aviones militares. Esta medida se toma en respuesta a la creciente crisis humanitaria en el enclave, exacerbada recientemente por la muerte de palestinos mientras esperaban en fila para recibir asistencia.
Biden detalló que la operación de socorro se implementará en los próximos días, aunque no especificó fechas exactas. Países como Jordania y Francia ya han realizado acciones similares, entregando suministros desde el aire a la asediada Gaza.
La decisión llega tras incidentes críticos en los que palestinos desesperados por alimentos se vieron atrapados en el fuego cruzado del conflicto israelí-palestino. «La gente está tan desesperada que personas inocentes han quedado atrapadas en una guerra terrible sin poder alimentar a sus familias», expresó Biden en la Casa Blanca.
En el marco de las negociaciones entre Israel y Hamas, el presidente estadounidense reveló que se está discutiendo la liberación de rehenes y un cese al fuego de al menos seis semanas, lo que permitiría un incremento significativo en la ayuda humanitaria para toda la región de Gaza.
John Kirby, portavoz de la Casa Blanca, enfatizó que estos lanzamientos aéreos formarán parte de un «esfuerzo sostenido» y que el primer lanzamiento probablemente consistirá en MREs (comidas listas para comer) militares.
La situación en Gaza es crítica, con aproximadamente 576,000 personas, una cuarta parte de su población, al borde de la hambruna, según informes de la ONU. El conflicto, que inició el pasado 7 de octubre con un ataque de Hamas contra Israel, ha dejado a la población en condiciones extremas, recurriendo a la ingesta de cactus para sobrevivir, mientras los hospitales reportan muertes por desnutrición y deshidratación.
A pesar de los desafíos logísticos, expertos militares como el general retirado de la Fuerza Aérea estadounidense David Deptula, aseguran que las fuerzas armadas de EE.UU. están más que capacitadas para llevar a cabo esta misión humanitaria de manera efectiva.
Sin embargo, funcionarios advierten que, si bien los lanzamientos aéreos pueden mitigar el sufrimiento, la solución a largo plazo requiere de la apertura de fronteras terrestres para una ayuda más sustancial. La coordinación con Israel sobre esta operación aún no ha sido confirmada oficialmente.