Ciudad de México – La Comisión de Quejas y Denuncias del Instituto Nacional Electoral (INE) ha instruido al presidente Andrés Manuel López Obrador a modificar o eliminar partes específicas de sus conferencias matutinas realizadas el 7, 11, 12 y 22 de marzo, y el 1 de abril, por contener expresiones relacionadas con el proceso electoral o propaganda gubernamental, lo cual está prohibido durante el periodo de campaña.
Esta decisión surge después de que el PAN y el PRD presentaran denuncias contra el presidente por la presunta difusión de propaganda gubernamental en un periodo prohibido y por el uso indebido de recursos públicos, alegando vulneración al principio de imparcialidad. Sin embargo, la conferencia matutina del 13 de marzo quedó excluida de esta orden al determinarse que el presidente únicamente respondió a un cuestionamiento sin emitir comentarios directamente relacionados con las elecciones.
La Sala Regional Especializada será la encargada de determinar si se incurrió en el uso indebido de recursos públicos por abordar temas electorales durante estas conferencias, conocidas como “mañaneras”.
En particular, durante la conferencia del 22 de marzo en Veracruz, se denunció el uso indebido de recursos públicos y la vulneración de los principios de imparcialidad y neutralidad, además de la equidad en la contienda electoral, por referencias al proceso electoral en curso, programas sociales y acciones de gobierno por parte del presidente y el gobernador Cuitláhuac García. Aunque se determinó que ciertas expresiones no estaban relacionadas con temas electorales, se ordenó la modificación o eliminación de aquellas partes donde se mencionaron acciones de gobierno y programas sociales.
Asimismo, la comisión del INE resolvió que en la conferencia del 1 de abril se vulneró la equidad en la contienda y se realizó propaganda gubernamental en periodo prohibido, instando nuevamente al presidente a abstenerse de inmiscuirse en asuntos electorales que podrían influir en el ánimo de la ciudadanía durante el proceso electoral.
Estas acciones reflejan el compromiso del INE por asegurar la equidad y la imparcialidad en el proceso electoral en curso, marcando un precedente importante en la regulación de la conducta de los funcionarios públicos durante periodos electorales.