Durante la inauguración de un hospital del IMSS-Bienestar en Culiacán, el presidente Andrés Manuel López Obrador abordó la reciente aparición del presunto testimonio de Ismael «El Mayo» Zambada, cofundador del cártel de Sinaloa, señalando que «no hay casualidad» en las circunstancias actuales. El mandatario aprovechó la ocasión para expresar su respaldo al gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, asegurando que «le tenemos toda la confianza».
López Obrador también subrayó que México es un país soberano, y criticó lo que calificó como una tentación de algunos sectores en Estados Unidos de intervenir en los asuntos internos de México. Además, la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, también presente en el evento, respaldó al gobernador, afirmando que «vamos a seguir apoyando al gobernador de Sinaloa y a su pueblo».
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El evento estuvo marcado por la noticia de que Zambada habría sido llevado a Estados Unidos contra su voluntad tras una reunión con Joaquín Guzmán López, hijo de «El Chapo» Guzmán. El presidente y Sheinbaum coincidieron en que la situación debía ser aclarada y que no se debía estigmatizar al estado de Sinaloa.