Ciudad de México. El modelo actual del seguro de gastos médicos mayores en México enfrenta una crisis de sostenibilidad, advirtieron representantes de la Asociación Mexicana de Agentes de Seguros y Fianzas (Amasfac), al alertar que los costos seguirán aumentando de manera desproporcionada y limitarán el acceso a este tipo de protección para la población.
Durante una conferencia de prensa celebrada en el marco del 34 Congreso Iberoamericano de la Confederación Panamericana de Productores de Seguros (Copaprose) México 2025, Cristóbal Ponce, presidente del Comité de Salud de la Amasfac, destacó que el costo de la salud privada en el país crecerá 4.5 veces más que la inflación general, lo que representa la mayor brecha en América Latina.
“En 2025 se espera una inflación médica privada del 15 por ciento en México, frente al 10 por ciento global. Esto inevitablemente impactará las tarifas de seguros médicos”, señaló.
Ponce enfatizó que el problema no está en el aumento de las primas, sino en el alza constante de los costos hospitalarios, los insumos médicos y el envejecimiento de la población, por lo que pidió a las autoridades actuar de inmediato para evitar riesgos financieros para el sistema asegurador.
Urgen regulación y medidas fiscales
El especialista propuso regular los precios hospitalarios y fomentar la transparencia, así como establecer guías médicas claras que contribuyan a contener el alza en los costos del sector salud. También planteó la posibilidad de exentar del IVA a los seguros médicos para adultos mayores, como una medida de incentivo fiscal.
Por su parte, Mónica Estrada, secretaria nacional de la Amasfac, explicó que muchas personas cuentan con seguros médicos por parte de sus empleadores, pero este tipo de prestaciones ha disminuido ante la eliminación de incentivos fiscales, lo que debilita el acceso a servicios médicos privados y transfiere mayor presión al sistema de salud pública.
Siniestralidad al alza
En 2024, la industria aseguradora en México pagó 122 mil millones de pesos por siniestros de gastos médicos, cifra que equivale al 14 por ciento del presupuesto federal destinado a la atención pública en salud, detalló la Amasfac. Además, la siniestralidad aumentó 14.9 por ciento respecto a 2023, lo que muestra una tendencia creciente sostenida en los últimos años.