Las comidas escolares llegan a unos 420 millones de menores en el mundo y los gobiernos están cada vez más convencidos de las ventajas que estos programas comportan para la sociedad; sin embargo un nuevo informe de la agencia alimentaria de la ONU advierte que aún hay muchos niños muy vulnerables sin acceso a esa fuente de sustento en los países en desarrollo.
En un momento en que 345 millones de personas enfrentan niveles críticos de hambre, incluidos 153 millones de niños y jóvenes, las comidas escolares son una red de seguridad fundamental para los niños y las familias vulnerables, afirmó este martes el Programa Mundial de Alimentos (PMA), advirtiendo que si bien esas comidas son cada vez más socorridas en todos los países, los niños más pobres siguen sin obtener ese beneficio y padeciendo altos niveles de inseguridad alimentaria.
En su informe El estado de la alimentación en el mundo, la agencia de la ONU señala que actualmente casi 420 millones de niños reciben comidas escolares a nivel global y afirma que los gobiernos están cada día más convencidos de que son una manera rentable de garantizar que los pequeños vulnerables reciban los alimentos que necesitan.
El PMA aseveró que un el almuerzo atrae a más estudiantes -sobre todo niñas-, a la escuela, les permite aprender mejor cuando están allí, y les ayuda a mantener una buena salud que, combinada con educación ofrece a los menores de los países de bajos ingresos la mejor ruta para salir de la pobreza y la desnutrición.
Las investigaciones han demostrado que los programas de comidas escolares pueden aumentar las tasas de inscripción en un 9% y la asistencia en un 8%, abunda el estudio.
El documento detalla que 75 países se han unido en una coalición que busca asegurar que para 2030 todos los niños puedan recibir una comida diaria y nutritiva en la escuela.
Fuente: ONU