Libia, rica en petróleo, se ha enfrentado a múltiples desafíos desde el derrocamiento del presidente Muamar Gadafi en 2011. El aplazamiento de las elecciones nacionales, previstas inicialmente para diciembre de 2021, ha agravado aún más la crisis.
El pasado mes de noviembre, el dirigente saliente de la Misión de Apoyo de la ONU en Libia (UNSMIL), Abdoulaye Bathily, invitó a los líderes de las cinco instituciones clave de Libia: el Gobierno de Unidad Nacional, la Cámara de Representantes, el Alto Consejo de Estado, el Ejército Nacional Libio y el Consejo de la Presidencia, a mantener conversaciones para tratar de salir de su estancamiento.
En conversación con Khaled Hussein de Noticias ONU, Bathily habló de la grave situación de la población de Libia y del renovado interés geopolítico en el país por parte de algunas potencias regionales e internacionales, provocado por crisis como el conflicto en Ucrania y el vecino Sudán, y la inestabilidad en el Sahel.
Noticias ONU: ¿Cuál es la situación actual en Libia?
Abdoulaye Bathily: Libia ha estado sometida a diferentes regímenes de transición desde 2011, y todos han decidido en un momento u otro crear las condiciones para la celebración de elecciones a fin de que haya paz y estabilidad en el país. Sin embargo, lo que hemos visto en la última década es que sólo han sido buenas intenciones proclamadas, pero no llevadas a la práctica.
Además, hemos visto que todos esos líderes de la transición en Libia continuaron su rivalidad, y en realidad no estaban interesados en que se celebraran elecciones. No estaban interesados en estabilizar el país y alimentaron las tensiones en el país, e incluso alimentaron las rivalidades entre sus partidarios, los grupos armados, que los apoyan, respectivamente. Además, hemos visto que están muy contentos con la situación actual, en la que pueden repartirse entre ellos los frutos del gobierno.
Libia no es un país pobre. A pesar de esta crisis, Libia sigue produciendo 1300 millones de barriles de petróleo al día. Hay recursos suficientes para que todos los libios vivan en la prosperidad. Sin embargo, lo que hemos visto es que el libio de a pie se ha empobrecido en los últimos 10 años.
Noticias ONU: Usted ha advertido de que el combate renovado por Libia entre actores internos y externos está dificultando la búsqueda de una solución. ¿Por qué se ha renovado esta pugna en los últimos tiempos?
Abdoulaye Bathily: En un momento del conflicto hubo cierto consenso entre los actores internacionales y regionales sobre la necesidad de ayudar a los libios a llegar a un acuerdo consensuado, a un acuerdo político que reuniera a todos los líderes libios, unificara el país y, por supuesto, devolviera la paz y la estabilidad.
Sin embargo, lo que he visto en los últimos meses es que, debido al impacto de la crisis ucraniana en Libia, tanto en términos de riqueza, petróleo y gas, como de posición militar y geopolítica de Libia en el Mediterráneo central, se ha renovado una especie de interés de varias potencias regionales e internacionales.
La crisis ucraniana ha aportado una nueva dimensión a la crisis en Libia por sus consecuencias económicas y geopolíticas. Al mismo tiempo, la guerra en Sudán también ha repercutido en los últimos meses tanto en la situación de seguridad como en la económica.
Más allá de la frontera sur inmediata de Libia, tenemos la crisis del Sahel, que también se ha agravado en los últimos meses en Mali, Burkina Faso y, por supuesto, la situación de los refugiados en Chad. Todo ello ha repercutido enormemente en la situación interna de Libia.
FUENTE: ONU