En un giro significativo en la industria energética mexicana, Petróleos Mexicanos (Pemex) ha reportado un notable aumento en su producción de hidrocarburos líquidos durante el año 2023. Según las estadísticas recientes, la producción de Pemex ascendió a un promedio de 1 millón 866 mil barriles al día, lo cual representa un incremento del 5.1% en comparación con el año 2022, cuando la producción fue de 1 millón 764 mil barriles diarios. Este aumento es el más significativo registrado durante el actual sexenio.
Este notable crecimiento en la producción se atribuye principalmente a la entrada en funcionamiento de nuevos campos petroleros, destacando entre ellos Quesqui y Tupilco. Estos nuevos campos han aportado más de 560 mil barriles al día, representando cerca del 30% de la producción total de Pemex. La explotación de estos campos ha sido crucial para alcanzar y mantener una producción constante superior a 1 millón 800 mil barriles a lo largo del año.
La dirección de Pemex, liderada por Octavio Romero Oropeza, ha enfocado sus esfuerzos en contrarrestar la declinación natural de los yacimientos en campos maduros, implementando un ambicioso programa de perforación de pozos para alcanzar sus metas sexenales. Además, se ha dado énfasis en la incorporación de producción temprana de pozos exploratorios, así como en el desarrollo acelerado de campos nuevos. Esta estrategia ha permitido a Pemex reducir los costos de inversión y acelerar el desarrollo de nuevos campos, logrando aumentos significativos en la producción de hidrocarburos en tiempos récord.
El incremento en la producción de Pemex no solo subraya los avances en la estrategia de exploración y producción de la empresa, sino que también apunta hacia un futuro más prometedor en términos de autosuficiencia energética para México. Con el fin del sexenio en el horizonte, estos avances representan un paso importante hacia la reducción del déficit nacional de hidrocarburos y fortalecen la posición de Pemex en la industria energética global.







