Moscú.– El presidente de Rusia, Vladimir Putin, acusó este jueves a Europa de escalar artificialmente las tensiones con Moscú “para cumplir las instrucciones de la Casa Blanca” y favorecer la compra de armas estadounidenses, al tiempo que advirtió que la respuesta rusa a la militarización del continente “no se hará esperar y será contundente”.
En la sesión final del Club Internacional de Debate de Valdai, realizada en Sochi, el mandatario ruso aseguró que las acusaciones sobre violaciones de espacio aéreo por drones y aviones rusos forman parte de un “juego peligroso que puede provocar conflictos armados”.
Putin advirtió que un eventual uso de misiles de crucero Tomahawk, de fabricación estadounidense, por parte de tropas ucranias dañaría severamente la relación bilateral con Washington, al considerar que “es imposible lanzar ese tipo de misil sin participación de militares estadunidenses”.
Aunque calificó a los Tomahawk como “poderosos pero anticuados”, señaló que su eventual entrega a Ucrania podría ser un intento de desviar la atención de los problemas internos de Estados Unidos.
El líder del Kremlin aseguró que Europa atraviesa un proceso de erosión interna debido a la inmigración descontrolada y la pérdida de valores, lo que, a su juicio, augura un futuro incierto para la región.
También calificó de “acto de piratería” la detención en aguas internacionales de un petrolero con bandera de un tercer país por parte de Francia, lo que atribuyó a un intento de provocar una reacción rusa y desviar la atención de problemas económicos europeos.
En relación con las sanciones a los hidrocarburos rusos, destacó que países como China e India mantienen su papel como principales compradores de petróleo y gas ruso, al valorar su soberanía frente a las presiones de Washington.
Putin afirmó que el mundo multipolar “es ya un hecho consumado” como consecuencia del intento de Occidente por mantener una hegemonía global. Rechazó las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien llamó a Rusia “tigre de papel”, y sostuvo que Moscú enfrenta a toda la OTAN en Ucrania y “avanza en todas las direcciones del frente”.
Asimismo, aseguró que Ucrania enfrenta un déficit de soldados y un alto número de desertores, por lo que, según dijo, “más temprano que tarde acabará por rendirse”.
Sobre la situación en Gaza, Putin calificó el conflicto como “un evento terrible en la historia contemporánea” y expresó que Rusia está dispuesta a respaldar las propuestas de Trump, siempre que conduzcan a la creación de dos Estados —Israel y Palestina— que coexistan en paz.