Nueva York. La crisis humanitaria en Gaza sigue empeorando. Más de un millón de niños no han recibido ayuda esencial en más de un mes debido al bloqueo israelí, alertó la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Medio Oriente (UNRWA). El bloqueo impide la entrada de alimentos, medicinas y otros suministros vitales, lo que agrava la situación para los 2.4 millones de personas que viven en el enclave.
El comisionado general de UNRWA, Philippe Lazzarini, criticó fuertemente el bloqueo israelí, afirmando que «nunca debe usarse como un arma de guerra». Acompañado de imágenes de almacenes vacíos, la agencia hizo un llamado urgente a la comunidad internacional para que presione a Israel para que termine con esta restricción.
Por su parte, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) reconocieron un error en su versión inicial sobre la muerte de 15 trabajadores sanitarios palestinos el mes pasado. Inicialmente, el ejército israelí había afirmado que los vehículos de los trabajadores no llevaban señales de emergencia cuando fueron atacados, pero un video reciente contradijo esa afirmación. El ejército israelí ahora investiga el motivo de este error en el informe original.
En un contexto de creciente tensión, el bloqueo a Gaza ha causado un grave impacto en la población, con más de un 80% de los habitantes dependiendo de la ayuda humanitaria. Las organizaciones internacionales han señalado que la situación es insostenible.
Además, las milicias palestinas lanzaron 10 cohetes hacia el sur de Israel, lo que llevó a una respuesta militar israelí. La violencia continúa afectando tanto a Gaza como a Cisjordania, donde un palestino de 14 años murió por disparos de colonos israelíes, mientras que otros dos menores resultaron heridos.
El presidente israelí, Benjamin Netanyahu, ha ordenado a su ministro de Defensa, Israel Katz, que continúe las operaciones militares intensivas contra Hamas, el movimiento islamista en Gaza, en respuesta a los ataques de cohetes.
La situación sigue siendo crítica y la comunidad internacional está bajo presión para intervenir y detener el sufrimiento de los civiles en Gaza y en los territorios ocupados.







