Ciudad de México, 28 de marzo de 2025 — Los nuevos aranceles anunciados por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, impactarán de forma directa a una quinta parte de las exportaciones mexicanas, afectarán a un millón de empleos vinculados al sector automotriz y pondrán en riesgo un segmento que representa aproximadamente el 4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, advirtió la industria automotriz mexicana.
La medida, oficializada este miércoles por el mandatario estadounidense mediante una orden ejecutiva, impone un arancel del 25 por ciento a todos los vehículos y autopartes que no sean producidos en Estados Unidos. Aunque incluye ciertas consideraciones especiales para México y Canadá por su participación en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), el impacto sigue siendo significativo.
La administración Trump detalló que los importadores bajo el T-MEC podrán certificar el contenido estadounidense de sus productos, de modo que el arancel se aplicará únicamente al valor de los componentes que no sean fabricados en territorio estadounidense. Aun así, la medida alcanzará a vehículos de pasajeros, camionetas ligeras y autopartes clave como motores, transmisiones y componentes eléctricos.
El sector automotriz de México es el más integrado con el estadounidense. De acuerdo con datos de la industria, entre el 30 y 40 por ciento de los componentes de los vehículos que México exporta a su vecino del norte son de origen estadounidense, proporción que se descontará del arancel, lo cual ofrece un respiro relativo frente a países como Alemania, Japón y Corea del Sur.
La Casa Blanca estima que la medida generará ingresos por 100 mil millones de dólares y promoverá la reindustrialización interna, primero mediante la construcción de plantas y luego con la fabricación local de vehículos. Los incentivos fiscales para consumidores estadounidenses solo aplicarán a autos producidos en su país.
No obstante, aún hay incertidumbre sobre la aplicación del arancel a las autopartes. Según explicó Harrison Fields, vocero de la administración estadounidense, los componentes que cumplan con las reglas del T-MEC seguirán exentos hasta que el Departamento de Comercio y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) definan los mecanismos de cobro aplicables al contenido no estadounidense.
México exporta anualmente automóviles y autopartes por un valor estimado en 135 mil millones de dólares a Estados Unidos, lo que representa el 22 por ciento del total de exportaciones mexicanas. En 2024, según datos del Inegi, las exportaciones automotrices del país ascendieron a 193 mil 907 millones de dólares a nivel global.
De los vehículos exportados, el 79.7 por ciento tuvo como destino Estados Unidos: un total de 2 millones 771 mil 287 unidades, de acuerdo con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA). Las principales plantas de producción se encuentran en estados como Coahuila, Nuevo León, Guanajuato, Puebla, Estado de México, Aguascalientes y San Luis Potosí, operadas por marcas como Volkswagen, Ford, General Motors y Stellantis.
La Industria Nacional de Autopartes advirtió que el arancel de 25 por ciento podría encarecer los vehículos en Estados Unidos en hasta 3 mil dólares por unidad. Además, si EE. UU. dejara de importar vehículos de México y Canadá, requeriría al menos 18 nuevas plantas de ensamblaje, con inversiones superiores a los 50 mil millones de dólares.







