La rápida respuesta a nivel global y local ha logrado avanzar mucho en el control de la enfermedad. El responsable de la agencia sanitaria mundial advierte, no obstante, que los contagios continúan en ciertas comunidades y países, además de que hay transmisión relacionada con viajes.
La Organización Mundial de la Salud ha declarado este jueves el fin de la emergencia sanitaria internacional por mpox (viruela del mono) pocos días después de hacer lo mismo con el coronavirus.
«Sin embargo, al igual que con el COVID19, eso no significa que el trabajo haya terminado. La mpox sigue planteando importantes retos de salud pública que necesitan una respuesta sólida, proactiva y sostenible», sostuvo el director de la Organización, el doctor Tedros Adhanom Gebreyesus.
El director, que tomó la decisión siguiendo la recomendación de un comité de expertos, explicó que en los últimos 3 meses se han notificado casi un 90% menos de casos que en los tres meses anteriores y alabó la respuesta de las organizaciones comunitarias y de los servicios de salud para alertar a los grupos más expuestos, como el colectivo LGBTI, de los peligros.
Según Tedros, esa disminución se debe a la movilización global y la rápida respuesta de la mayoría de los países, al igual que a las compañías farmacéuticas y las agencias reguladoras, “que desempeñaron un papel importante para ayudar a expandir el acceso a los medicamentos de prevención y tratamiento para contrarrestar la enfermedad”.
“Debemos aplaudir el trabajo de las autoridades de salud pública y las organizaciones comunitarias. Reaccionaron rápida y ampliamente para informar a las personas en riesgo, alentar y apoyar el cambio de comportamiento y abogar por el acceso a pruebas, vacunas y tratamientos”, añadió.
Fuente: ONU