Washington. El cometa 3I/Atlas, un objeto interestelar que atraviesa el sistema solar a gran velocidad, se ha convertido en tema de fascinación científica y viralidad en redes sociales, donde algunos usuarios —e incluso un legislador estadunidense— han sugerido que podría tratarse de una nave extraterrestre. La NASA y la comunidad astronómica han desmentido rotundamente esa hipótesis.
Thomas Puzia, astrofísico y director del observatorio chileno que detectó el cometa, advirtió que las teorías difundidas en Internet, muchas impulsadas por imágenes falsas creadas con inteligencia artificial, son “peligrosas y engañosas”, pues desplazan el análisis científico. “Todos los hechos, sin excepción, indican que se trata de un objeto normal del espacio interestelar”, señaló en declaraciones a Afp.
El debate ha sido avivado por Avi Loeb, investigador de Harvard, quien insiste en que no debe descartarse un origen tecnológico, como ya planteó en 2017 con el objeto interestelar Oumuamua. Puzia rechaza esa postura: “No hay nada que no podamos explicar con física y astrofísica”.
NASA publica nuevas imágenes y descarta origen alienígena
La NASA difundió esta semana nuevas fotografías del cometa para aclarar su naturaleza. “Tenemos muchas ganas de encontrar señales de vida en el universo (…) pero 3I/Atlas es un cometa. Tiene el aspecto y el comportamiento de un cometa”, afirmó Amit Kshatriya, alto funcionario de la agencia espacial.
Un visitante excepcional, pero natural
El 3I/Atlas es el tercer objeto proveniente del espacio interestelar detectado en la historia. Desde su descubrimiento en julio, ha generado interés por su posible antigüedad y composición. Según Tom Statler, científico de la NASA, estudiar este tipo de cuerpos ofrece “una ventana al pasado remoto”, quizá anterior a la formación del Sol y la Tierra. “Da escalofríos pensarlo”, afirmó.
A diferencia de los dos objetos interestelares observados anteriormente, cuya presencia fue fugaz, los astrónomos han podido seguir a 3I/Atlas durante meses y anticipan nuevas oportunidades conforme se acerque a la Tierra.
Darryl Seligman, de la Universidad Estatal de Michigan, señaló que la mejora en los métodos de observación permitirá identificar muchos más objetos interestelares en el futuro.
Aunque 3I/Atlas despierta curiosidad global, la comunidad científica coincide: no hay evidencia de que sea una nave espacial, sino un cometa extraordinario que puede aportar valiosa información sobre los orígenes de los sistemas planetarios.






