Washington. Las aerolíneas estadounidenses cancelaron casi mil 200 vuelos este martes, en el quinto día consecutivo en que las suspensiones superan el millar, luego de que el gobierno federal impusiera reducciones obligatorias en las operaciones aéreas para enfrentar problemas de seguridad derivados de la falta de personal en el control del tráfico aéreo.
La Administración Federal de Aviación (FAA) ordenó la semana pasada a las aerolíneas reducir 4 por ciento de los vuelos diarios a partir del viernes en 40 de los principales aeropuertos del país, medida que ha provocado una fuerte afectación en la red aérea nacional.
De acuerdo con reportes oficiales, las reducciones se ampliaron a 6 por ciento el martes y alcanzarán 8 por ciento el jueves, mientras que el próximo 14 de noviembre podrían llegar al 10 por ciento si no mejora la disponibilidad de personal especializado.
Las aerolíneas y la FAA mantienen negociaciones para evaluar si los recortes podrán disminuirse conforme se acerca el fin del cierre gubernamental récord de 42 días, que ha impactado directamente la operación de agencias federales, entre ellas la propia autoridad aeronáutica.
Hasta ahora, las compañías aéreas han advertido que las cancelaciones podrían afectar los vuelos domésticos e internacionales durante la próxima semana, especialmente en aeropuertos de alta demanda como Atlanta, Chicago, Nueva York y Los Ángeles.







