Madrid, 5 de agosto de 2025.– La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) elevó su previsión de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) regional para 2025 a un 2.2%, dos décimas por encima de su estimación anterior, gracias a un mejor desempeño económico observado durante el primer trimestre del año.
Así lo señala el organismo en su informe anual Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2025: Movilización de recursos para el financiamiento del desarrollo, en el que también advierte que la región continúa enfrentando un período prolongado de bajo crecimiento estructural.
De cara a 2026, la Cepal anticipa una expansión del PIB del 2.3%, aunque señala marcadas diferencias entre países y subregiones. En Sudamérica, el crecimiento proyectado para 2025 es de 2.7%, impulsado principalmente por la recuperación de economías como Argentina, Ecuador y Colombia, así como por la consolidación del crecimiento en Paraguay.
Por el contrario, México y Centroamérica mostrarían un crecimiento más modesto del 1% para 2025, afectado por una menor demanda externa, especialmente desde Estados Unidos. No obstante, países como Guatemala, Panamá y República Dominicana podrían superar el 3.5% gracias al dinamismo del sector servicios, el consumo interno y las remesas.
En el Caribe (sin contar a Guyana), se prevé un crecimiento del 1.8% en 2025 y del 1.7% en 2026, lastrado por la disminución del turismo y los altos costos de importación de energía y transporte. Guyana continuará destacando en la región con tasas elevadas de crecimiento, respaldadas por inversiones sostenidas en el sector de hidrocarburos.
La Cepal también advierte sobre un panorama macroeconómico complejo, con una demanda interna débil por la desaceleración del consumo privado, condiciones financieras restrictivas y la persistencia de conflictos geopolíticos. Además, el informe prevé un aumento del déficit de cuenta corriente y una mayor dependencia del capital externo, en un contexto marcado por el enfriamiento comercial con Estados Unidos debido a nuevos aranceles.
En el mercado laboral, se espera una desaceleración del crecimiento del empleo, con una tasa de desempleo regional estimada en 5.6%. Aunque se observa una leve mejora en la informalidad y brechas de género, el ritmo de recuperación sigue siendo limitado.
Finalmente, la Cepal pronostica una inflación regional estable para 2025 y 2026, aunque advierte sobre posibles presiones inflacionarias en caso de nuevas disrupciones externas.