Washington, 23 de mayo de 2025. En una reñida votación de 215 votos a favor y 214 en contra, la Cámara de Representantes de Estados Unidos, controlada por los republicanos, aprobó la madrugada de este jueves el proyecto de ley presupuestaria impulsado por el presidente Donald Trump, que contempla un impuesto del 3.5% a las remesas, por debajo del 5% inicialmente propuesto.
La iniciativa —de más de mil páginas— aún debe ser aprobada por el Senado, también de mayoría republicana, antes de que pueda ser promulgada por Trump. La votación ocurrió tras dos noches de debates intensos y negociaciones para contener la rebelión del ala más conservadora del partido.
El paquete legislativo incluye la ampliación de los recortes fiscales de 2017, la cancelación de incentivos a energías limpias aprobados bajo la administración de Joe Biden, y restricciones al acceso a programas sociales, como salud y asistencia alimentaria.
También se contemplan medidas de endurecimiento migratorio, como la contratación de decenas de miles de nuevos agentes fronterizos y la creación de infraestructura para deportar hasta un millón de personas por año.
De acuerdo con una comisión independiente del Congreso, el plan fiscal aumentaría el déficit en más de 4.8 billones de dólares en los próximos diez años. Para equilibrar ese gasto, la propuesta impone fuertes recortes a programas como Medicaid, del cual dependen más de 70 millones de estadounidenses de bajos ingresos.
El presidente de la Cámara, Mike Johnson, calificó el proyecto como un momento “transformador” que marcará un punto de inflexión en la historia del país. Sin embargo, sectores conservadores consideran que los recortes no son lo suficientemente profundos, mientras que los demócratas lo han calificado como “devastador” para la clase media.
“El mayor recorte a la atención médica en la historia de Estados Unidos… para implementar las mayores exenciones fiscales a los multimillonarios”, denunció el líder de la minoría demócrata en la Cámara, Hakeem Jeffries.
Desde México, Esteban Moctezuma, exembajador y referente en temas migratorios, celebró la reducción del gravamen a las remesas a través de un mensaje en la red social X (antes Twitter), calificándolo como un “primer avance importante” en defensa de la economía de los migrantes mexicanos y sus familias.
Se espera que el proyecto sea debatido y votado en el Senado antes del 4 de julio. Legisladores republicanos han señalado que podrían proponer modificaciones al texto aprobado por la Cámara.







