Ciudad de México – El consumo privado en México ha mostrado signos de contracción al inicio del 2024, según los datos más recientes publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). En enero, el Indicador Mensual de Consumo Privado (IMCP) registró una caída de 0.6% en comparación con el mes anterior, marcando el fin de dos meses consecutivos de crecimiento.
Esta disminución se produce a pesar de las expectativas previas que indicaban una leve recuperación del consumo privado. El Indicador Oportuno del Consumo Privado (IOCP) había anticipado un incremento mensual de 0.1% para enero de 2024; sin embargo, el resultado final ha quedado considerablemente por debajo de lo proyectado.
El IMCP se situó en 108.7 puntos durante el primer mes del año, evidenciando no solo una contracción secuencial de 0.6% sino también un modesto avance de 1.9% en comparación con enero de 2023. Este crecimiento anual es significativamente inferior al registrado en diciembre de 2023, que alcanzó una tasa anual de 5.5% con cifras ajustadas por estacionalidad.
El repunte de la inflación en enero, impulsado por el aumento en los precios de productos agropecuarios y servicios típicos del inicio de año, ha tenido un impacto negativo en el consumo privado. La llamada «cuesta de enero» parece haber restringido la capacidad de gasto de empresas, familias e individuos en el país.
Desglosando los datos por componente y ajustados por estacionalidad, el consumo de bienes y servicios de origen nacional disminuyó 0.8%, mientras que el consumo de bienes importados experimentó un leve aumento de 0.4%, beneficiándose de la evolución favorable del tipo de cambio.
En términos anuales y con cifras ajustadas, el consumo privado mostró un incremento general de 1.9%. Dentro de este crecimiento, el gasto en bienes importados se disparó un 14.3%, contrastando con una caída de 0.5% en el gasto en bienes y servicios nacionales. El consumo de bienes nacionales retrocedió 2.5%, aunque el gasto en servicios nacionales aumentó un 2.1%.
Estos resultados ponen de manifiesto los desafíos económicos que enfrenta México al inicio de este año, donde la inflación y otros factores han limitado el dinamismo del consumo privado.