Ciudad de México. — La sequía severa que afecta a diversas regiones del país ha llevado a los gobiernos estatales de Sinaloa, Tamaulipas y Durango a solicitar acciones urgentes para enfrentar la falta de agua, el aumento de incendios forestales y la expansión de plagas.
En Sinaloa, el gobernador Rubén Rocha Moya solicitó formalmente a la Coordinadora Nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa, declarar emergencia por sequía en los 20 municipios del estado. Las presas operan al 7.3% de su capacidad promedio, y la administración estatal reconoce que ha sido rebasada tanto en capacidad operativa como financiera para atender la situación.
“La petición se hizo desde diciembre, pero fue rechazada. Volveremos a presentarla con base en las condiciones actuales”, expresó el mandatario.
De ser aprobada la declaratoria, se prevé recibir apoyo federal para la instalación de plantas potabilizadoras portátiles, así como para el llenado de cisternas que distribuyan agua a las comunidades más afectadas. Actualmente, el gobierno estatal opera 60 pipas con este fin.
En Tamaulipas, 18 de los 43 municipios se encuentran en semáforo rojo por la crisis hídrica, según se informó en la 19 Reunión Ordinaria de Seguimiento del Semáforo del Cuidado del Agua, encabezada por el secretario de Recursos Hidráulicos, Raúl Quiroga Álvarez. El comité de seguimiento actualizó los niveles de alerta con base en el uso intensivo y la disponibilidad del recurso.
Entre las localidades en alerta crítica se encuentran Reynosa, Matamoros, Nuevo Laredo, Río Bravo y Camargo, mientras que 14 municipios se encuentran en nivel amarillo y 11 más, entre ellos Tampico y Altamira, se mantienen en nivel verde. Las autoridades hicieron un llamado urgente a preservar y optimizar el uso del agua.
En Durango, el inicio de 2025 ha sido particularmente difícil, con un déficit de lluvias de 63.7% en el primer trimestre del año, de acuerdo con datos de la Conagua. La secretaria de Recursos Naturales, Claudia Hernández Espino, explicó que no se registraron precipitaciones en febrero ni marzo, y en enero solo cayeron 10.8 mm, muy por debajo del promedio histórico.
Esta situación ha derivado en un aumento alarmante de incendios forestales: se han registrado 101 siniestros que han afectado más de 6 mil 500 hectáreas, el doble que en el mismo periodo de 2024. El municipio de Mezquital concentra la mayor cantidad de incidentes.
Además, la sequía ha propiciado la propagación del gusano descortezador, plaga que ha dañado cerca de 9 mil hectáreas de bosque, principalmente en el municipio de San Dimas. Hernández Espino afirmó que la plaga está bajo control gracias a medidas como la instalación de trampas con feromonas desde finales del año pasado.







